A menudo me encuentro con personas en mis charlas o en mis cursos que hacen suyos problemas o pruebas que son de otras personas.
Si hacemos esto lo que conseguimos es atraer ese tipo de energía a nosotros y por lo tanto se va a manifestar en nuestra vida cotidiana.
Cuando nos preocupamos porque otra persona lo está pasando mal intentamos ayudarle a superar esa prueba o experiencia, inclusive si esa persona no nos ha pedido ayuda, y además terminamos haciendo ese problema nuestro.
Es normal que no nos guste ver a nuestros seres queridos pasarlo mal, pero hemos de ser conscientes de que todos tenemos el libre albedrío a la hora de elegir nuestras experiencias y la forma en que aprendemos y nos desarrollamos hasta "aprobar el examen".
Este libre albedrío lo respetan en todo el universo, los guías, seres de luz que conocemos como ángeles, arcángeles... o el nombre que queramos ponerle... nosotros no somos menos, no solo tenemos el regalo de disfrutar nuestro libre albedrío que nos permite elegir en todo momento como y qué queremos disfrutar y experimentar sino que también tenemos la obligación y la responsabilidad de respetar esas elecciones de los demás... por mucho que nos duela.
Por demás está decir que si la persona no nos pide ayuda o si se la ofrecemos y nos dice que "no, gracias", no podemos ni debemos hacer nada para intentar ayudarle. Debemos respetar ese libre albedrío que dicha persona ha elegido.
Y aunque no lo hiciéramos, solo estaríamos desperdiciando nuestro tiempo y nuestra energía ya que su Yo Superior no dejaría que nuestras ayudas ni las de los seres que pudiéramos haber invocado para ayudarle, entraran en su proceso... él ha elegido y nosotros no somos nadie para querer cambiar las elecciones de nadie.
Suena duro, lo se... pero esto no es egoísmo, ya hemos intentado pedirle permiso para ayudarle pero si no desea esa ayuda hemos de respetar su elección... ¿o no te gustaría que respetaran tus propias elecciones y la forma en que te has planificado experimentar aquí?.
Otra cosa diferente es si esa persona sí acepta o te pide tu ayuda, entonces si podemos ayudar... pero ayudar sin hacer el problema nuestro, no te olvides... o se convertirán en dos problemas, el de esa persona y el tuyo.
Otra cosa que me gustaría comentar sobre el libre albedrío es que nosotros podemos elegir a las personas con las que nos queremos relacionar, por la vibración parecida, gustos, etc... esto no es egoísmo!
Siempre puedo y debo elegir a las personas con las que me quiero relacionar ya que son las que me ayudan a vivir mi experiencia aqui como yo lo he elegido... no quiere decir que yo me sienta superior o inferior al resto de personas, significa que el papel que están experimentando en esta obra de teatro que todos vivimos, en esta ocasión no congenia con mi proceso de experimentación actual. Pero aunque no los elija como personas cercanas... RECONOZCO EL SER DE LUZ QUE SON... IGUAL QUE YO!
Assaya
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